La meditación nos conecta con nosotros mismos a un nivel profundo, brindándonos paz interior.
Esta práctica ancestral trata de educar la mente para anclarse en el presente, liberarse de pensamientos y reducir el estrés.
Existentes diversos estudios científicos que reconocen que la meditación diaria refuerza el sistema inmunológico, mejora el sistema circulatorio, digestivo y muscular.
Hay estudios que demuestran que esta práctica mejora la atención al enseñarnos a concentrarnos y ser conscientes de nuestros pensamientos.
También mejora nuestra capacidad de aprendizaje.
La noche y el sueño son un espejo del estado de tu mente a lo largo del día.
Al obtener un estado de relajación con la meditación, conciliarás el sueño más rápido y podrás descansar mejor, lo que facilitará que el día siguiente lo empieces con más energía.
Hay investigaciones que sugieren que la mejoría en la concentración y la flexibilidad mental obtenidas gracias a la meditación también ayudan a proteger al cerebro del declive cognitivo.
Es decir, meditar rejuvenece el cerebro porque induce cambios en su fisiología.
La meditación puede ayudarte a fortalecer la inteligencia emocional, conseguir una vida más plena y tener un mayor bienestar.
Meditar mejora la memorización, fomenta la introspección y la autoconciencia.
Con solo 30 minutos de meditación al día podes potenciar esta capacidad, que te permitirá tener un mejor desarrollo en el trabajo, la escuela y la vida diaria.
Esta práctica milenaria, es capaz de reducir los niveles de cortisol y ayudar a que te sientas más relajado y calmado, con un estado de quietud y estabilidad que podés conseguir con tan solo 10 minutos de práctica.
Puede ayudarte a poner fin al estrés:
El estrés crónico puede ocasionar problemas de salud (tanto mentales como físicos) como dolor de cabeza, malestar estomacal, presión arterial alta, diabetes, entre otros.
La meditación es una buena alternativa para evitar las enfermedades asociadas al estrés.
La práctica de la meditación ofrece beneficios para nuestros músculos y estado físico en general.
Provoca un estado de relajación muscular que puede sernos de gran ayuda después de realizar actividades deportivas.
Esto genera un estado óptimo del sistema muscular, con lo cual se previenen lesiones y problemas musculares.
Genera claridad mental y emocional, amplifica la atención y despeja la mente.
Los procesos creativos, mejoran considerablemente después de una meditación.