Las modalidades de braza y mariposa en natación son ejercicios perjudiciales para la escoliosis, ya que implican hiperlorosis lumbar. La escoliosis, que es la existencia de una curvatura lateral anormal en la columna, es incompatible con algunos ejercicios, pero no en todos los casos ni en el deporte en general. Aunque la escoliosis, en general, no es un impedimento para cualquier actividad, sí que se pueden dar casos, relacionados siempre con la afección, que imposibilitan realizar ejercicio. El presidente de la Federación Española de Medicina del Deporte explica que el deporte es incompatible “sólo en casos de escoliosis de grado muy avanzado, sintomáticas, cuando están en una fase de progresión, cuando se necesita corsé y en algunas post-cirugías”. Los deportes que están contraindicados en estos casos son aquellos que suponen una sobrecarga de la columna vertebral, como actividades con levantamientos de grandes pesos. Deportes que implican grandes torsiones de la columna vertebral, como los lanzamientos en atletismo, o ejercicios que implican una gran hiperlorosis lumbar. La práctica de estas actividades supone carga, rotaciones y torsiones en la columna que pueden aumentar la progresión de la escoliosis y que, además, pueden convertirla en sintomática, provocando dolor en el paciente. Aunque la escoliosis pueda suponer un obstáculo para determinadas prácticas, existen otros ejercicios que sí se pueden realizar y que son beneficiosos para reducir el impacto de la curvatura de la columna. El experto afirma que son, básicamente, “aquellos que aumentan el tono y fuerza de la musculatura paravertebral y de la espalda en general, además de los ejercicios o actividades que favorecen la extensión de la espalda.